Frases:
"Los niños son como cemento fresco, cualquier cosa que caiga sobre ellos deja una huella" Haim Ginott.
"Enseñar a niños a contar es bueno, pero enseñarles lo que realmente cuenta es mejor". Bob Talbert.
Educacion: El proyecto frenteamplista al borde de un fracaso monumental
1/7/2013 elobservador.com.uy
Hace unos días el número dos de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Jerónimo Roca, escribió en su cuenta de Twitter: “Si el MIDES (Ministerio de Desarrollo Social) sigue abierto dentro de seis años habremos fracasado”. El planteo, interesante, parece encerrar un dejo de esperanza de que las políticas sociales, al menos las más agresivas y costosas, no sean tan necesarias dentro de seis años. La pregunta que se impone es ¿por qué razón habría de ser así? Uruguay lleva más de 10 años creciendo -en algunos tramos a tasas chinas- y las aristas más duras de la pobreza siguen lastimando a miles. Cuando los
tecnócratas manejan cifras sobre la reducción de la pobreza son datos que no se pueden desestimar porque de alguna forma hay que medir los resultados, pero en general encierran pequeñas trampas tales como que con darle algunos pesos a una persona que figura como “pobre” en una estadística, deja de serlo. La fragilidad de su situación depende de que pueda seguir recibiendo ese dinero y todos sabemos que ya llegará el día en que las cuentas del país no sean tan auspiciosas como lo vienen siendo desde 2003. Pero pensar que este crecimiento económico que no logra abatir el núcleo duro de la pobreza y las políticas que algunos cuestionan como asistencialistas son la mezcla que terminará por hacer más o menos necesario al Mides, es como preocuparse por cómo sacar la humedad de una pared generada por un caño que se rompió en los cimientos. La más profunda, duradera y, a la larga, barata de todas las políticas sociales está haciendo agua por todos lados y amenaza con ahogarnos a todos: la educación. Ahí, y no en las políticas sociales tradicionales, radica el gran fracaso de todos estos años de gestión frenteamplista. La educación amenaza con reducir a una anécdota todos los logros obtenidos desde 2005 y dejar al país sumido por décadas en una catástrofe que, a la larga, puede terminar afectando aspectos institucionales. Hay una emergencia nacional que el gobierno parece no advertir. La violencia, la inseguridad y la pobreza son fenómenos multicausales, pero en todos hay un factor que siempre está presente: los niveles educativos de la ciudadanía. En vez de estimar la peligrosidad de los delincuentes por el número de rapiñas deberíamos medir los años que estuvieron fuera de un aula. Si no se logra un quiebre profundo y verdadero en la educación, todos estos años de gobierno frenteamplista no habrán sido otra cosa que un fracaso con peligrosas proyecciones de futuro.
tecnócratas manejan cifras sobre la reducción de la pobreza son datos que no se pueden desestimar porque de alguna forma hay que medir los resultados, pero en general encierran pequeñas trampas tales como que con darle algunos pesos a una persona que figura como “pobre” en una estadística, deja de serlo. La fragilidad de su situación depende de que pueda seguir recibiendo ese dinero y todos sabemos que ya llegará el día en que las cuentas del país no sean tan auspiciosas como lo vienen siendo desde 2003. Pero pensar que este crecimiento económico que no logra abatir el núcleo duro de la pobreza y las políticas que algunos cuestionan como asistencialistas son la mezcla que terminará por hacer más o menos necesario al Mides, es como preocuparse por cómo sacar la humedad de una pared generada por un caño que se rompió en los cimientos. La más profunda, duradera y, a la larga, barata de todas las políticas sociales está haciendo agua por todos lados y amenaza con ahogarnos a todos: la educación. Ahí, y no en las políticas sociales tradicionales, radica el gran fracaso de todos estos años de gestión frenteamplista. La educación amenaza con reducir a una anécdota todos los logros obtenidos desde 2005 y dejar al país sumido por décadas en una catástrofe que, a la larga, puede terminar afectando aspectos institucionales. Hay una emergencia nacional que el gobierno parece no advertir. La violencia, la inseguridad y la pobreza son fenómenos multicausales, pero en todos hay un factor que siempre está presente: los niveles educativos de la ciudadanía. En vez de estimar la peligrosidad de los delincuentes por el número de rapiñas deberíamos medir los años que estuvieron fuera de un aula. Si no se logra un quiebre profundo y verdadero en la educación, todos estos años de gobierno frenteamplista no habrán sido otra cosa que un fracaso con peligrosas proyecciones de futuro.
¿Cuánto cobran los maestros en el mundo?
1/7/2013 elobservador.com.uy
Un japonés gana como mínimo US$ 2.500 por mes, un uruguayo 870; el país asiático está entre los siete primeros en pruebas PISA. Uruguay en el lugar 43 y por debajo de la media. En medio del debate por el dinero que se le debe asignar a los profesores y docentes de la enseñanza, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó un estudio titulado "La educación 2013" que da cuenta del dinero que invierten los gobiernos en determinados países. Una de las secciones presenta lo que perciben los maestros en las escuelas. El país en donde se gana más es en Luxemburgo, donde los maestros perciben como base unos US$ 64.000 anuales.
En tanto en Uruguay, un maestro que recién ingresa gana US$ 10.442 anuales (870 mensuales), hasta cuatro años de ejercicio. Esto equivale a unos 17.400 pesos uruguayos mensuales. En las pruebas PISA (Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos de la OCDE) de 2009, Japón, uno de los países donde los maestros ganan más finalizó como el sexto mejor país del mundo con habilidad lectora, séptimo en matemáticas y tercero en ciencias. Uruguay, por su parte, finalizó en las dos primeras en el lugar 43 y en ciencias en el 44, de 61 países estudiados. Además, está por debajo de la media de OCDE, que es el puesto 29. La OCDE asegura que "los países con mayor rendimiento en PISA son aquellos que destinan más dinero en la educación". "El dinero por sí solo no puede comprar un buen sistema educativo. Los países y economías que mejor rendimiento tienen son aquellos que creen – y actúan en consecuencia – que todos los chicos pueden tener éxito en la escuela. Entre las economías más fuertes, aquéllas que priorizan la calidad de los profesores sobre el tamaño más pequeño de las clases tienden a obtener mejor rendimiento.
Economistas hacen foco en crisis educativa: "Frena el crecimiento"
Elpais.com.uy 23/6/2013
Los malos resultados que se registran en la enseñanza ya están afectando el crecimiento del país y significan un obstáculo para el desarrollo a futuro. Los economistas advierten sobre esa realidad y se vuelcan cada vez más a analizar la materia. En el último tiempo se ha hecho frecuente escuchar diagnósticos y propuestas de destacados economistas del país en referencia a la crisis que existe en la enseñanza. Los niveles de repetición, los porcentajes de deserción y las herramientas que brinda el sistema para insertar al estudiante en el ámbito laboral son algunas de las aristas que los profesionales han señalado y comentado. Javier de Haedo, Gabriel Oddone, Ernesto Talvi, Aldo Lema, Ignacio Munyo y Juan Dubra son algunos de los economistas que a través de distintas instancias han comenzado a acercarse a la materia. En diálogo con El País, algunos de ellos afirmaron que no significa que recién ahora la economía se haya empezado a fijar en la educación, e incluso agregaron que son dos áreas que están intensamente ligadas. Pero, a la misma vez, dijeron que los malos resultados educativos han empezado a impactar en el campo económico de forma tal que se ha vuelto por demás necesario comprender qué ocurre con la enseñanza para entender cuáles son las perspectivas que tiene el país. "La educación está empezando a ser cuello de botella para el crecimiento del país. Uruguay históricamente tuvo una mano de obra calificada, pero la crisis en el sistema educativo en los últimos 15 años ha hecho que se empiece a terminar esto", dijo a El País Ignacio Munyo, economista e integrante del instituto Ceres.
Luego, agregó que "la mitad de la nueva mano de obra que ingresa en el mercado es funcionalmente analfabeta", dado que son individuos que "saben leer, saben escribir con faltas, pero no pueden cumplir una tarea de forma acertada en un trabajo formal". Munyo explicó que en Ceres realizaron estudios que demostraron que "Uruguay hoy se encuentra por encima de sus posibilidades de producción" y que el país "está tocando el techo de su capacidad máxima productiva porque tiene un fuerte cuello de botella en la calidad de su fuerza de trabajo. La educación y su calidad empieza a ser una limitante para el crecimiento", dijo el economista. Aldo Lema, economista y consultor, dijo a El País que la interacción entre la educación y el mercado laboral es "central". Así, afirmó que la oferta de trabajo puede estar condicionando algunos problemas que hay en el campo de la enseñanza. En ese ámbito, señaló como el hecho más grave la deserción que se registra en Secundaria. "El capital humano de la sociedad determina el crecimiento económico. Es muy importante la educación para el crecimiento económico y, como consecuencia de eso, para la reducción de la pobreza", entiende Lema.
Mujica pidió ayudar a quienes perdieron la asignación familiar
01/07/2013 subrayado.com.uy
Son miles de niños y adolescentes que perdieron el ingreso que les da el Estado por no ir a clases. El presidente quiere que vuelvan al sistema educativo. El gobierno intentará reinsertar en el sistema educativo a los más de 30 mil niños y adolescentes que fueron dados de baja del sistema de Asignaciones Familiares por no asistir a ningún centro de enseñanza. El tema fue tratado este lunes en el Consejo de Ministros, donde el presidente José Mujica mandató a la Comisión de Inclusión Educativa a contactarse con las familias de los niños y adolescentes que dejaron de ser percibir estas prestaciones del Estado. El Secretario de la Presidencia, Homero Guerrero, dijo que Mujica está “especialmente preocupado” por estos menores de edad que no estudian y pidió que se busque la forma de que vuelvan al sistema educativo, en cualquiera de las formas posibles. De esta forma estas familias volverían a cobrar la asignación familiar.
Tiempo de replantear la tarea de educar
http://www.clarin.com/educacion/Tiempo-replantear-tarea-educar_0_902909960.html
Los argentinos hemos dejado de confiar en la educación como un elemento de progreso. Revertirlo es un compromiso de todos. Los problemas que enfrenta la educación argentina, ya tan bien conocidos, pueden sintetizarse señalando que:
1. contamos con relativamente pocos ciudadanos educados: de cada 100 niños que comienzan la educación primaria, al cabo de doce años sólo 37 completarán el nivel medio;
2. casi la mitad de quienes lo hacen tiene dificultades para comprender lo que leen y para realizar simples ejercicios de matemática;
3. existen marcadas desigualdades tanto en la cantidad como en la calidad de la educación que reciben los alumnos dependiendo de los niveles sociales, económicos y culturales de las familias de las que provienen;
4. hay en el país casi un millón de jóvenes menores de 25 años que no trabajan ni estudian, es decir, que no hacen nada;
5. asistimos a una alarmante declinación de la escuela pública que en el pasado resultó esencial para intentar igualar las oportunidades y formar nuestra ciudadanía.
¿Qué hacer para revertir esta preocupante situación? Resulta evidente que, aunque no en las palabras, en los hechos hemos dejado de confiar en la educación como un elemento de progreso individual y social. Se ha roto el pacto fundante de la escuela basado en la alianza de los padres con los maestros para educar a sus hijos. Hoy los padres se unen a ellos en contra de la institución educativa a la que perciben como una herramienta social de opresión, que condiciona la entrega del bien deseado, la certificación. Aunque cueste admitirlo, el interés está centrado en eliminar esos requisitos, una evidencia más del facilismo que está permeando toda nuestra sociedad. Es preciso volver a pensar que la educación es esencial para la construcción de las personas y que supone un cierto compromiso de todos, una aceptación de la necesidad de dedicarle una atención y un esfuerzo que trascienden lo simplemente formal. De allí que resulte prioritario recuperar el prestigio social de la educación cuya caída se evidencia en la escasa consideración de la que hoy gozan los docentes que refleja esa pérdida de confianza en la educación. Maestros y profesores son concebidos como los cuidadores de la guardería ilustrada en la que se está transformando la escuela. Cada día ésta es más un centro de asistencia social que una institución cuya tarea central es la de formar seres humanos. Darles de comer, sí, pero también darles de leer, introducir a las nuevas generaciones al saber y al conocimiento, proporcionarles el acceso a las herramientas que nos hacen humanos. La calidad docente, clave de la enseñanza, exige la previa reconstrucción de esa confianza perdida en la educación.
Un 25 por ciento de los docentes ha sido insultado por familiares de sus alumnos
http://www.teinteresa.es/educa/ciento-docentes-insultado-familiares-alumnos_0_904110764.html
La falta de respaldo por parte de los padres en problemas de disciplina, impartir clase a un grupo con un número elevado de alumnos, presenciar las agresiones entre escolares o sufrir violencia verbal y desconsideraciones por parte de los estudiantes son algunos de los motivos por los que más de la mitad del profesorado en España sufre niveles muy elevados de estrés. Situaciones que pueden conllevar violencia, a las que están potencialmente expuestos los profesores como consecuencia de su actividad laboral, son las razones por las que más del 50 por ciento manifiesta padecer mucho estrés según un estudio realizado por la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT a 1.125 profesores de toda la geografía española. Actualmente, los profesores deben enfrentarse a nuevos contextos o que en el pasado se daban en menor medida que les generan niveles altos de estrés. De hecho, el 56,5 por ciento de los docentes sufre comportamientos habituales que impiden el desarrollo normal de su labor como constantes interrupciones en clase, groserias, o contestaciones. Asimismo, más del 50 por ciento destaca que los insultos se dan con cierta frecuencia entre los alumnos, el 25 por ciento asegura que ha sido insultado por familiares de los escolares, y un 7,4 por ciento indica que alguna vez ha sufrido una agresión por parte de los estudiantes. Los trabajadores de los centros educativos constituyen "uno de los colectivos más afectados por trastornos de origen psicosocial, entre los que se encuentran el estrés, la depresión, la fatiga psíquica, o el llamado síndrome del desgaste" según ha señalado la secretaria de Salud Laboral de la Federación Estatal de Enseñanza de UGT, Lydia Asensio. Además, ha destacado que "los riesgos psicosociales en los profesores aumentan de forma indirecta con los recortes en el ámbito de la educación, donde se está quitando profesorado de apoyo y se ha subido la ratio". Con el fin de ayudar a los docentes a solucionar estos problemas de estrés, UGT ha elaborado una página web específica sobre riesgos psicosociales en la enseñanza en la que se incluye un cuestionario para la valoración de factores de riesgo, un cuestionario de evaluación del síndrome del desgaste, un test de valoración del estado de salud del trabajador, un protocolo de actuación para acoso escolar y otro para acoso laboral.
¿Por qué los alumnos le pegan a los docentes?
http://www.bolinfodecarlos.com.ar/170412_docentes.htm
Lo que iba a ser una entrega de evaluaciones escritas como cualquier otra, se convirtió en una discusión intimidante, seguida de agresión física. Insatisfecha con la nota, la estudiante tomó los argumentos académicos para cuestionar la corrección y avanzó hacia la profesora Christiane Souza Alves, durante la clase. "Ella me insultó con los peores insultos, después se arrojó sobre mí cuando salía del aula y me empujó", dice Christiane, quien, después de 13 años de docencia, estuvo un semestre con escolta para de la institución educativa a su casa, sufrió ataques de pánico y comenzó a tomar antidepresivos. El suyo es otro triste episodio de las estadísticas de violencia en el aula. La economista Christiane es profesora universitaria pública, ambiente donde se ha incrementado el número de agresiones a docentes, al igual que en las escuelas privadas. "Ella gritó,"A vos te pagan para que me apruebes'", dice Christiane. La estudiante en cuestión, una joven de 20 años, sigue cursando en la universidad. Solo se le prohibido asistir a las clases de Christiane. "La relación profesor-alumno terminó", afirma la profesora, quien pidió no identificar la institución en donde ocurrieron sus problemas pero se sabe que es en Minas Gerais, donde casi la mitad de las denuncias recibidas por una línea telefónica habilitada para abusos, proviene de la enseñanza privada. El servicio para denunciar abusos, pionero en Brasil, fue creado en 2011, en respuesta a la muerte del profesor Kassio Vinicius Castro de Gomes, en diciembre de 2010. Él fue asesinado a puñaladas en el hall principal de la Universidad Metodista Izabela Hendrix, una institución tradicional de educación superior de la capital minera, con pagos mensuales que rodean los u$s 540. Profesores sin autoridad, estudiantes con exceso de poder y coordinaciones de escuelas omisas, constituyen la bomba de tiempo de la violencia escolar. "Las aulas están cada vez más violentas porque la sociedad en sí también está violenta", dice la investigadora Jussara Paschoalino. "Las agresiones contra los docentes provienen de muchos lugares, pero el mayor desgaste que percibo tiene que ver con los alumnos", ella agregó. "El alumno está siendo envuelto en un discurso en el que es difícil admirar al maestro, porque él gana poco y, dentro de esa lógica, quien gana poco vale poco", afirma Roseli. Financiera y socialmente desvalorizado, resta al maestro una sensación de abandono. "El profesor tiene que ingeniárselas en el aula para enseñar y, a la vez, para cuidar de lo que puede suceder allí adentro", dice F., de 28 años. Él es profesor de Educación Física en una institución pública de Vespasiano, región metropolitana de Belo Horizonte, y ha tenido que dejar la escuela escoltado por un oficial de policía después de haber sido amenazado por un estudiante. El muchacho, después de haber sido reprendido por el maestro a causa de un comportamiento violento durante la práctica de basquetball, regresó a la escuela acompañado por un grupo de no alumnos para "ajustar cuentas" con el profesor. El docente F. fue capaz de manejar la situación y continúa dando clases en la misma escuela, pero pide no revelar su identidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario